¿Bailamos?

Y enmedio de risas, música de ska, humo de cigarrillo y cerveza, ella lo abrazo y lo tomó de la mano y después ella bailó con él. 


Él no sabía que pensar... 


El amor es como Don Quijote:

sólo recobra la cordura

para morir.

Quiereme en mi locura pues mi camisa de fuerza eres tú.